Para resaltar aún más estos textiles, se utilizan colorantes naturales como son la grana cochinilla, añil, pericón, palo de brasil, nogal, sólo por mencionar algunas.
Algunos de los tintes tiñen en forma directa como el caracol púrpura que es de origen animal; otros tiñen por infusión al hervirlos en agua como es el caso de las plantas o cortezas de los árboles, las maderas en contrario deben ser maceradas en agua por semanas y el añil también tiene que fermentar para poder obtener el colorante.
Otros ingredientes que se utilizan son los mordentes o fijadores que ayudan al tintorero a obtener una gama de tonalidades utilizando un mismo colorante. Estos fijadores pueden ser naturales como las sales minerales(el alumbre y el cremor tártaro) o vegetales( como las flores silvestres, jugos ácidos de frutos, semillas y plantas, ) y sales naturales como óxido de hierro, cal de piedra, bicarbonato,cenizas de madera; en ésta parte es donde el tintorero juega con los colores en los lienzos de seda que puede ser teñidos una vez finalizada la pieza como el rebozo, el huipil o la bufanda y en el caso contrario, primero se tiñen los hilos en madejas y posteriormente se tejen.
El procedimiento para el teñido de estas prendas varía dependiendo de la cantidad de fibra o telas que se quiere teñir, previamente lavado y escurrido, se sumergen en los fijadores triturados y disueltos en el agua en seguida se coloca el recipiente en calor como la estufa, fuego con leña ó anafre de carbón, se deja reposar por varias horas ; una vez transcurrido el tiempo necesario se procede al siguiente paso que es el de teñido de las telas o hilos de seda en cualquiera de los colorantes naturales previamente hervidos o macerados la tonalidad que adquiere la prenda depende de el tiempo que se sumerja en el tinte.